POR JOSÉ Mª ALEGRE BATLLE, ASESOR TÉCNICO DE ANARPLA
El comercio de “desperdicios” = residuos de materiales plásticos, siempre ha sido simultaneo al de los propios materiales y objetos. Prueba de ello es que desde el inicio del comercio de materiales plásticos ha tenido sus propios mercados interiores e internacionales, éstos con códigos arancelarios, conocidos como códigos TARIC e INTRASTAT (http://www.plancameral.org/web/portal-internacional/preguntas-comercio-exterior/-/preguntas-comercio-exterior/0280e886-dd97-4e7c-a2ae-392a69b2da47), y que hace años para importarlos en España, habían “cupos” que debían solicitarse al entonces Ministerio de Comercio. El gran flujo era el de Alemania gran proveedor de Italia y Francia para España. Los mercados se fueron globalizando hasta la situación actual de prácticamente libre comercio de residuos no peligrosos entre países de la OCDE.
Se han producido desajustes estadísticos. Mientras a efectos estadísticos de comercio exterior “aduanas” (http://aduanas.camaras.org/) continúan rigiéndose por los códigos TARIC, es decir se agrupan por naturaleza del monómero constituyente principal del polímero, la resina (polietileno, polipropileno, poliestireno, etc.), la contabilidad estadística de los residuos plásticos va en función del origen del proceso que ha originado el residuo (códigos CER), residuos de envases plásticos, de la agricultura, de recogidas selectivas industriales asimilables a urbanas, etc. A su vez otro conflicto, a efectos estadísticos, es que las Directivas Europeas sobre gestión de residuos y con especial atención a los residuos de envases, tienen fijados unos objetivos de reciclado y de valorización, que son globales para envases que a través de las declaraciones de gestión anuales deben ser comunicadas a las autoridades. Pero no todos los países, en sus regulaciones de detalle, los tratan del mismo modo, a título de ejemplo unos tienen agrupados los “embalajes industriales” con los “envases domésticos”, otros no.
A la hora de analizar estadísticas comparativas entre países, los resultados no son satisfactorios para todos. El borrador en curso de trabajos de la Revisión 2015 de la Directiva Europea sobre residuos, intentará dar directrices claras para uniformar criterios, si bien por el momento quedan flecos para ponerse de acuerdo, como el de si las TM de materiales recuperados para su valorización deben darse en cifras de bruto o de neto. Otro punto de distorsión es cuando se considera que los residuos recolectados, preparados y exportados a destinatarios de otros países que aseguran su valorización, mientras que no sea la energética o uso como combustible, son contabilizables a efectos estadístico y de cumplimiento de objetivos de reciclado, como materiales valorizados en el país de origen y dentro de España en la Comunidad Autónoma de origen.
La industria recicladora de plásticos en España siempre ha sido de las potentes de Europa, quizás cerrada a ámbitos locales, detrás de Italia, pero lejos de lo ocurrido en Inglaterra hace unos años que intentaron restringir las exportaciones de desperdicios plásticos y se encontraron con excedentes que no podían llegar a procesar y tuvieron que reemprender su tolerancia a las exportaciones.
La situación ante la que se encuentran los países europeos de cumplimiento de objetivos de gestión de residuos, lo que realmente preocupa al sector reciclador, como empresarios, ha sido y es el de la disponibilidad de “materia prima” para sus procesos y gestión de su empresa. Llevamos unos años en que de España como fuente de materiales a reciclar, la compra de “desperdicio industrial”, básicamente embalaje (envases) de Polietileno (sacos, fundas de paleta, film envolvente, retráctiles, otros) no están disponibles fácilmente en el mercado de compra, por una razón tan simple, de que la demanda y precios a que pagan los países asiáticos han producido un flujo exportador de dichos materiales desde los almacenistas y consecuentemente dificultades de aprovisionarse, ni de importación de otros países europeos, a precios deseables para mantener las instalaciones y producir un “reciclado de calidad a precio razonable” para la industria transformadora, compradora de reciclados.
Recordemos cifras de España de 2012; las globales de reciclado mecánico fueron del orden de 600 KTm Las exportaciones, según datos Intrastat, alrededor de las 200 KTm es decir proporción 3 a 1. Si repasamos estadísticas de años anteriores se puede interpretar que el descenso de reciclado de residuos plásticos de origen industrial ha corrido caminos casi paralelos al de incremento de las exportaciones.
De Europa se exportaron alrededor de las 3.200 KTm, un 32 % desde Alemania, 24 % desde Inglaterra, entre Bélgica, Holanda y España el 25 % y el resto, 19 % entre los otros los otros 22 estados de la UE. Los países de destino, últimamente, fueron Malasia, India, China, USA.
En Alemania, los recicladores se quejan de que a pesar de que se incrementa la demanda – ventas de PP y de PE reciclado, su aprovisionamiento de desperdicio ha sufrido un aumento de precio desmesurado, acompañado de incremento de tarifas eléctricas y en consecuencia pierden la esperanza de que vuelvan a tener beneficios, con consecuencias negativas para el sector. Consideran que los precios, del desperdicio, están “sobrecalentados” atribuyéndolo a que las exportaciones dificultan el aprovisionamiento de film y de botellas.
De USA. En cifras del año 2011 (publicado por la ACC- APPR) también dan cifras del peso importante de las exportaciones a países asiáticos (a su vez son importadores de la UE, en menor cantidad que las exportaciones). Dan a exportación un 20 % de la Botella recogida. Y para filmes y para plásticos rígidos dan a exportación casi las mismas cantidades que se reciclan, del orden de 200 KTm para cada sector.
Son prácticamente coincidentes los comentarios finales de los informes de USA, Alemania y Europa en general.
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Preocupación de la disminución de expectativa de beneficios para las empresas - Los aprovisionamientos continúan bajo presión, especialmente la botella, a pesar de que se haya observado disminución de la demanda de China e incluso algunos negociantes tengan dificultades en cumplir sus compromisos
- Disminución de rendimiento de las balas procedentes de la recolección doméstica.
- Se ha tenido que asumir que la oferta – demanda, al fin y al cabo el precio y coste del aprovisionamiento, se regula en mercados globalizados (importaciones – exportaciones). Particularmente el aprovisionamiento para reciclado de botellas y filmes plásticos que son negocios a escala internacional que afectan a la competitividad del sector de la recuperación.
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